¿Por qué somos inglesia bautista?

UNA IGLESIA QUE AMA A DIOS Y A LAS PERSONAS

Probablemente ha visto que varias iglesias cristianas tienen diferentes nombres, algunas se llaman iglesias bíblicas, metodistas, presbiterianas, pentecostales, etc. Nuestra iglesia tiene por distinción el título de bautista y queremos explicar cuáles son las razones.

El antecedente más próximo se encuentra en el período de la Reforma en el siglo XVI. La iglesia católica había desarrollado un sacramento donde los niños tenían que ser bautizados para quitar el pecado original. Sin embargo, esta práctica no es clara en la Biblia. Lo que sí es claro es que el “bautismo” era un ritual que servía principalmente como identificación con un grupo o persona. Los primeros cristianos fueron bautizados como Cristo mandó en Mateo 28:19 en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Esta fue la manera en que los primeros cristianos se identificarían con Cristo. 

Un ejemplo muy claro sucedió cuando un etíope se convirtió al cristianismo. En la escena relatada en el libro de Hechos 8, Felipe le explicó sobre cómo Cristo cumplió la profecía de Isaías. Después de haber conversado sobre esto él mismo dijo: “¿qué impide que yo sea bautizado?” esto daba entender que estaba listo para identificarse con Cristo, y Felipe le dijo que el “requisito” era creer de todo corazón, a lo cual él confesó: “creo que Jesucristo es el Hijo de Dios.”

De igual manera sucedió en el tiempo de la Reforma, un grupo especialmente en Inglaterra comenzó a bautizar a adultos principalmente que creían en Cristo y la salvación por fe. Estos cristianos no creían que la salvación se podía obtener por obras, ni sacramentos, ni otro ritual, sólo por creer en Cristo. Así que las personas comenzaron a llamarles “Bautistas” por el hecho de volverse a bautizar después de hacer una confesión pública de fe en Cristo.

Es importante mencionar que antes de la Reforma ya existían grupos que practicaban la forma bíblica del Bautismo, sin embargo, no siempre fueron llamados “Bautistas.” Esto nos lleva al distintivo más antiguo después de la práctica del Bautismo y es el creer que la Biblia es la única regla de fe y práctica. Esto distinguió a varios grupos de creyentes que no estuvieron de acuerdo con la iglesia católica especialmente en las prácticas de bautismo de infantes, el purgatorio, la salvación por obras, la autoridad de sacerdotes y papas entre muchos otros aspectos. Los cristianos que no estuvieron de acuerdo trataron de mantener una fidelidad a las Escrituras y las enseñanzas que la Biblia sí decía, sin poner a la tradición, concilios y credos a la par de la Biblia. Por lo tanto, las Iglesias Bautistas se han distinguido por poner la Biblia como la regla de fe y práctica y bautizar a personas que entienden el evangelio y públicamente pueden confesar que Cristo es el Salvador de sus vidas.

Sobre los años las Iglesias Bautistas ha desarrollado otros distintivos que los distinguen de otras iglesias. Estos distintivos se pueden recordar por el acróstico “bautista.”

Biblia como única regla de fe y práctica

Autonomía de las iglesias locales. Esto significa que cada iglesia tiene su gobierno en el grupo de creyentes que lo componen y no depende de un gobierno centralizado o una sede principal.

Únicamente dos rituales conmemorativos que la iglesia práctica como obediencia a lo que Cristo dijo: el bautismo como una identificación pública con Cristo, y la cena del Señor que muchos conocen como la eucaristía que es solamente para recordar el sacrificio de Cristo y no tiene ningún poder sobrenatural en sí misma.

Todos los creyentes son sacerdotes delante de Dios, por lo que no necesitan de un intermediario para confesar pecados y pedir ayuda de Dios en oración.

Iglesia compuesta por miembros regenerados y no por personas que se dicen cristianos. Los miembros regenerados son los que han nacido espiritualmente de nuevo como Juan 3 enseña, y ese nacimiento les ha cambiado su vida y les ha dado confianza de ser hijos de Dios como Juan 1 enseña.

Separación de la iglesia y el estado. Esto significa que cumplimos con nuestras responsabilidades como ciudadanos de un país, pero no permitimos que el estado imponga creencias o prácticas sobre la iglesia.

Todos los creyentes tienen libertad de conciencia. Esto significa que cada hijo de Dios es responsable ante Dios por todos sus actos y esto le permite interpretar la Biblia y aplicarla como le parezca correcto en aquello que la Escritura no es muy clara.

Acepta sólo dos tipos de líderes en la iglesia para su funcionamiento, pastores y diáconos. El pastor(es) son encargados de supervisar, cuidar y proteger al pueblo de Dios especialmente por la predicación y enseñanza de la Palabra de Dios. Los diáconos son personas encargadas de servir en los asuntos variados para que la iglesia funcione bien, por ejemplo, las finanzas, el mantenimiento, la visita a viudas y huérfanos por mencionar algunos.

Es importante mencionar que estos distintivos no son los únicos que la iglesia enseña. La iglesia trata de enseñar todo lo que la Biblia dice en sus sesenta y seis libros. Es importante mencionar también que no creemos que las Iglesias Bautistas son las únicas iglesias verdaderas o que ellas son las únicas que predican fielmente la Palabra de Dios. Reconocemos que otras iglesias con otros nombres también predican correctamente la Biblia, sin embargo, como hemos dicho, tenemos diferencias en ciertas prácticas y creencias en cuanto al funcionamiento de la iglesia local.